Si usted tiene una lesión musculoesquelética o disfunción del movimiento, su médico puede derivarlo a terapia física para ayudar a disminuir el dolor y mejorar la movilidad. Sus síntomas pueden ser leves o usted puede tener síntomas que limitan severamente su movilidad funcional.
Existen muchas opciones de tratamiento para los pacientes que son enviados a terapia física. Los agentes físicos y diferentes modalidades de fisioterapia se utilizan a menudo para disminuir el dolor y la inflamación. Los ejercicios pueden ser recetados para ayudar a mejorar la resistencia, la fuerza, o la amplitud de movimiento. Su fisioterapeuta debe estar preparado para explicarle el motivo de cada tratamiento y qué esperar de cada tratamiento.
El ejercicio es un esfuerzo físico controlado aplicado al cuerpo para ayudar a mejorar la fuerza, la amplitud de movimiento o flexibilidad. El ejercicio puede ser pasiva o activa. Gimnasia pasiva es aquella que requiere que usted simplemente relajarse mientras que otra persona, como un fisioterapeuta, se aplica la tensión. Un ejemplo de esto es un estiramiento isquiotibiales cuando una persona levanta la pierna para alargar los músculos isquiotibiales en la parte posterior de su muslo.
Si usted asiste a la terapia física en una clínica, en el hogar o en el hospital, es probable que se dedican a algún tipo de ejercicios para ayudar a mejorar su movilidad. Muchas veces se le indicará en un programa de ejercicios en casa. El programa de la casa es un grupo de ejercicios que son recetados por su terapeuta físico que realice por su cuenta.El programa de ejercicios en casa puede ser muy importante para ayudarle a volver a la función normal.
2. Ultrasonido
El ultrasonido es un tratamiento de calentamiento profundo utilizado para tratar muchos trastornos musculoesqueléticos, como esguinces, distensiones, o tendinitis. El ultrasonido es administrado por su terapeuta físico utilizando una máquina de ultrasonido. Se presiona suavemente contra su piel y se aplica en pequeños barridos circulares cercanas al lugar de la lesión. Una pequeña cantidad de gel se utiliza para que las ondas de ultrasonido sean absorbidos en la piel y músculos.
3. Estimulación Eléctrica y TENS
La estimulación eléctrica transcutánea (TENS y estimulación neuromuscular eléctrica) se utiliza de vez en cuando en la terapia física para ayudar a disminuir el dolor alrededor del tejido lesionado. Hay dos teorías sobre cómo funciona la estimulación: la teoría de la puerta y la teoría de opiáceos.
Otras formas de estimulación eléctrica se pueden utilizar para contraer los músculos.
Esto se conoce como la estimulación eléctrica neuromuscular (EENM) y se utiliza para ayudar a los músculos lesionados "un reaprendizaje" de cómo funcionar correctamente.
4. Tracción
La tracción se utiliza en el tratamiento del dolor lumbar y dolor en el cuello para ayudar a disminuir el dolor y mejorar la movilidad en la columna vertebral.
Para utilizar tracción lumbar, debe estar atado a una máquina mecánica. Hay un chaleco que ayuda a apoyar sus costillas, y otro dispositivo que se envuelve alrededor de la pelvis. El chaleco y el dispositivo de la pelvis se estabilizan con correas, y una fuerza mecánica se aplica con una máquina.
La tracción cervical se aplica, ya sea en la posición de sentado o acostado. Si se sienta, un arnés está unido a la cabeza y un sistema de poleas se usa con un pequeño peso adjunto. El peso proporciona la fuerza de tracción mientras se sienta cómodamente en una silla. Acostado o en posición supina, la tracción se utiliza en un dispositivo específico. Usted debe acostarse sobre la espalda y la correa de su frente en el dispositivo. Entonces, una bomba neumática se utiliza para ayudar a proporcionar la fuerza de tracción en el cuello.
En teoría, la tracción ayuda a separar las articulaciones y los espacios de disco en la espalda baja o en el cuello, que a su vez ayuda a disminuir la presión sobre los nervios espinales.
5. Movilización conjunta
La movilización conjunta se produce cuando el fisioterapeuta mueve pasivamente las articulaciones de su cuerpo en direcciones específicas. Esto puede ayudar a disminuir el dolor y mejorar la movilidad. Aunque a menudo pensamos en nuestras articulaciones en movimiento como bisagras, hay un movimiento de deslizamiento que se produce también entre las articulaciones del cuerpo. Este movimiento de deslizamiento se incrementa durante las movilizaciones conjuntas. El grado en que su terapeuta mueve cada articulación depende de la cantidad de la presión y la dirección de la fuerza aplicada a la articulación.
Si bien la movilización conjunta es un tratamiento pasivo, su fisioterapeuta le puede enseñar técnicas de auto-movilización para que pueda administrar su problema de forma independiente. Esto puede ayudarle a volver a la función normal de forma rápida y que ofrece una estrategia para prevenir problemas futuros.
6. Masaje
El masaje se se trata con las manos haciendo un movimiento parecido a amasar los tejidos lesionados de su cuerpo para ayudar a disminuir el dolor, mejorar la circulación y disminuir la tensión muscular. Hay muchas técnicas de masaje, incluyendo effleurage, pettrisage y el punto de activación de masajes.
7. Calor
El calor húmedo o compresas calientes, se pueden aplicar a su cuerpo si usted tiene una lesión. El calor ayuda a aumentar la circulación a los tejidos lesionados, relajar los músculos y aliviar el dolor.
En una clínica de fisioterapia las compresas calientes se mantienen en un dispositivo llamado Hydrocollator. Este es un gran tanque de agua caliente. Las compresas calientes son paquetes de tela llenas de arena, arcilla y una mezcla de sílicio. El paquete caliente generalmente se mantiene en la parte del cuerpo lesionada durante 15 a 20 minutos.
Se debe tener cuidado al usar compresas calientes ya que la piel puede sufrir quemaduras.
8. Hielo
Si usted tiene una lesión se puede aplicar compresas frías o hielo a su cuerpo para ayudar a disminuir el dolor y controlar la inflamación. El hielo se utiliza por lo general durante la fase aguda o inicial de la lesión para limitar la hinchazón localizada alrededor de los tejidos.
Las compresas frías se aplican por lo general de 15 a 20 minutos. Como las compresas calientes se debe tener cuidado para evitar daños en la piel.
9. La iontoforesis
La iontoforesis es una forma de estimulación eléctrica que se usa para administrar medicamentos a través de la piel para los tejidos inflamados o lesionados. Muy a menudo, un esteroide como la dexametasona se usa en el tratamiento de la inflamación. Este esteroide puede ayudar a disminuir el dolor y la hinchazón de los tejidos que se produce cuando se inflaman.
La iontoforesis se puede utilizar en el tratamiento de otras condiciones dependiendo de la medicación que se utiliza durante el tratamiento.
10. láser o terapia de luz
La terapia de luz implica el uso de la luz en una longitud de onda específica para ayudar a mejorar el proceso de curación de los tejidos lesionados. El tratamiento es indoloro y suele durar aproximadamente de uno a tres minutos. Para aplicar la terapia de luz su fisioterapeuta realizará una emisión de luz directamente sobre la parte del cuerpo lesionada.
La terapia de luz se puede utilizar en el tratamiento del dolor crónico, inflamación o cicatrización de heridas.
La teoría detrás de la terapia de luz es que los fotones de luz de energía de transporte, y esta energía aplicada a los tejidos lesionados pueden ayudar a mejorar los procesos celulares y acelerar la curación o disminuir el dolor.
11. Hidromasaje
El hidromasaje es una forma de hidroterapia y se utiliza para ayudar a mejorar la circulación, mantener las heridas limpias o controlar la inflamación. Puede ser con agua caliente o fría. La temperatura normal para un jacuzzi caliente es entre 98 y 110 grados Fahrenheit. Un baño de hidromasaje frío es normalmente de 50 a 60 grados Fahrenheit.
Las bañeras de hidromasaje tienen un motor o agitador que ayuda a mover el agua alrededor de la parte del cuerpo que está siendo tratada. Este movimiento puede tener un efecto calmante y también puede ser utilizado en el tratamiento de desbridamiento de una cicatriz.
Una sesión típica de hidromasaje consiste en colocar la parte del cuerpo a tratar en el agua y relajarse mientras el agua se arremolina alrededor de ella. Ejercicios suaves se pueden realizar para ayudar a mejorar el movimiento alrededor de la parte del cuerpo mientras está en la bañera de hidromasaje. Se debe tener cuidado para asegurar que la bañera de hidromasaje no está demasiado fría o caliente ya que las temperaturas extremas pueden dañar tu piel durante el tratamiento.
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